Biografía – Alberto Quintanilla a través de sus palabras

Alberto Quintanilla del Mar, nació en la ciudad de Cusco, el 29 de abril de 1932, hijo de Juan Alberto Quintanilla Montesinos y de María Jesús del Mar Dueñas, quienes tuvieron una gran familia, compuesta por 15 hijos (4 hermanos y 11 hermanas, de los cuales, Alberto fue el primer niño).

Durante su niñez, Alberto recorría las calles de piedra de ese Cusco antiguo, en búsqueda de las historias de personajes cotidianos que alimentaban su gran imaginación. En esos recorridos pudo descubrir que el arte entraba en comunión con la historia, a través de los restos arqueológicos de la ciudad así como con los paisajes, las danzas y la música, experiencias que le llevaron a hacer artesanías a manera de juego, que luego vendía en la conocida feria denominada Santurantikuy, en el mes de diciembre.

Al terminar sus estudios secundarios, en el año de 1950 se matricula en la Escuela Regional de Bellas Artes de Cusco, que se encontraba en un periodo de transición y cambios, para lo cual fue invitado como director, don Mariano Fuentes Lira, conocido artista cusqueño. Este mismo año se suscita el terremoto en la ciudad de Cusco, que ocasionó graves daños al patrimonio cultural material artístico. Por ello en el año de 1952, se convoca al acceso a unas becas de capacitación en restauración de obras de arte en la ciudad de Lima, con el pintor español Julián de Tellaeche (Fundador del Taller de Restauración del Patrimonio Artístico Nacional Peruano), quien vino a Perú contratado por la UNESCO para conformar la escuela de restauración de pinturas de la Escuela Cusqueña en el Convento de San Francisco en la ciudad de Lima. Quintanilla fue elegido como uno de los becados. Paralelamente asistirá a la Escuela Nacional de Bellas Artes de Lima, dirigida por Juan Manuel Ugarte Eléspuru, por un periodo de tres años. Posteriormente, en 1955 regresa a Cusco para ocupar el cargo de restaurador hasta el año de 1957.

Luego retorna a la Escuela Nacional de Bellas Artes de la ciudad de Lima para concluir sus estudios, egresando con medalla de oro en el año de 1959 junto a la conocida “promoción dorada”. 

En el año de 1959, Quintanilla realiza su primera muestra individual en el Instituto de Arte Contemporáneo (IAC) que fue reseñada por Sebastián Salazar Bondy y en 1961, participa de la VI Bienal de Sao Paulo, como parte de la delegación peruana invitada.

Ese mismo año,  debido a su gran propuesta artística es becado por el gobierno francés, con un viaje a Francia para estudiar en la especialidad de grabado de la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París, aprendiendo diversas técnicas de grabado y perfeccionando sus técnicas de restauración. Al llegar a Francia, se da cuenta que el diploma peruano no es reconocido por el sistema educativo francés por lo que tuvo que presentar un nuevo portafolio de dibujos que fueron evaluados por una comisión de artistas de la Escuela de Bellas Artes de París, conformada por Robert Cami, Jean – Eugene Bersier y Lucien Couteau, quienes le dieron una opinión favorable y pudo continuar con sus estudios durante 8 años en la especialidad del grabado.

Es así como Quintanilla trabajó y continuó sus estudios en París. Llegando a ser observador en el taller de restauración del Museo del Louvre, bajo la dirección de Madame Madeleine Hours. Por recomendación personal de Desirée Lieven tomó cursos de grabado en la Academia Stanley William « Bill » Hayter.

Es este dominio de las técnicas de grabado lo que distingue a Quintanilla, en especial lo producido en los talleres de UM Graphic en Copenhague, por Jens Christian Sorensen en Hjorring y el de Jacques de Champfleury en París.

En 1972, Alberto Quintanilla gana la Medalla de oro en la Bienal de Florencia, y en 1987 la Medalla de Oro en la Bienal de Berlín. Quintanilla también ha sido condecorado por la Municipalidad Provincial del Cusco y el Congreso de la República en el año de 2010. En 2014, fue homenajeado por la Derrama Magisterial.

En el año 2016 la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú, le otorga la “Medalla de Honor Daniel Hernández”, por su contribución al arte y la cultura a la institución y al Perú.

Las obras de Alberto Quintanilla se pueden encontrar en colecciones públicas o privadas de todo el mundo: Estados Unidos, Canadá, Suecia, Finlandia, Francia, España, Italia, Suiza, Alemania, Inglaterra, Argentina, Brasil, Perú y Venezuela.

Así también, se destacan en las colecciones de museos como: Museo de Arte Moderno de Nueva York, E.E.U.U, Museo de Arte Moderno de París, Biblioteca Nacional de Francia (Cabinet des Estampes), Museo de Arte Moderno de São Paulo – Brasil, Museos de Arte Moderno de Oslo y de Stavanger – Noruega, Museo de Dresde, Museos de Berlín, Museo de Weimar – Alemania, Museos de Cracovia y de Poznan – Polonia.

Hoy en día, Alberto Quintanilla vive entre París, Lima y Cusco, y sigue creando y participando de diversas muestras de arte a nivel nacional en Perú y en otros países. El arte de Quintanilla no pretende seguir ninguna tendencia y por esta razón ha adquirido una dimensión atemporal:

“… No soy un pintor realista, pero tampoco soy un pintor abstracto. Mi imaginario personal pertenece al imaginario colectivo de mi pueblo. Enseñándolo, estoy sirviendo a mi pueblo y, en este sentido, se puede decir que soy un artista comprometido.”
Alberto Quintanilla- Noviembre 2019